miércoles, 25 de mayo de 2016

¿En qué malgasta nuestro dinero el Instituto Navarro de Administraciones Públicas (INAP)?

Imagen de la fachada principal del edificio que comparten el Departamento de Cultura y Turismo con el INAP, junto a la Catedral de Pamplona
 
Muchos españoles recordarán todavía aquella canción de Perales que decía "¿de dónde es? ¿a qué dedica el tiempo libre?". Pues para el caso nos va que ni pintado, puesto que durante meses, en concreto desde que tomo posesión de sus cargos la nueva dirección del Instituto Navarro de Administraciones Públicas (INAP) con el kanvio, no sabíamos realmente a que se dedicaban durante la jornada laboral en dicho Instituto. En primer lugar, para los profanos en la materia, el INAP tiene encomendada principalmente dos tareas; la co-gestión junto a la Dirección General de Función Pública de las convocatorias de oposiciones, y la formación a los empleados públicos.

Durante los últimos años, ante la congelación de convocatorias debido a la paralización de las Ofertas Públicas de Empleo por los recortes, el INAP no ha tenido mucho trabajo en gestionar los farragosos procesos selectivos de ingreso en la función pública foral. Luego su gran cometido ha consistido en gestionar la formación, tanto la general como la correspondiente a idiomas comunitarios y euskera. Añadir a esto que desde el kanvio, el euskera ha pasado a ser gestionado por el Instituto Navarro del Vascuence o Euskarabidea, luego el INAP ha perdido una atribución más. En cuanto a la convocatoria general de cursos para empleados públicos, se realizan anualmente dos convocatorias de acciones formativas, una el primer trimestre y otra para el segundo. Generalmente para diciembre de un año se ofertan a los empleados los cursos del primer trimestre del siguiente año.

Pues bien, para el año en curso, las acciones formativas del primer trimestre no se han ofertado a los empleados públicos hasta finales del mes de abril; si bien los presupuestos para el año 2016 no entraron en vigor hasta febrero (algo inexplicable e incluso de dudosa legalidad), una vez entrados en vigor no se entiende que no se ofertaran ya los cursos del primer trimestre, siendo por lo demás prácticamente un copia y pega de la convocatoria de 2015. Y aquí entra en juego la canción (solo que en este caso no hace referencia al tiempo libre, sino al tiempo de trabajo): ¿a qué se ha dedicado el INAP durante casi un año? si contamos que no ha gestionado convocatorias de oposiciones, que los cursos del euskera los gestiona el euskarabidea, y todo el desfase en los cursos de los empleados públicos, está claro que a algo se ha dedicado toda la estructura del INAP.

Pues bien, por algunas informaciones nos comentan que uno de los cometidos del Instituto durante estos meses ha sido nada menos que volver a realizar un trabajo que ya estaba hecho. Me explico; cada vez que una persona realiza un curso que oferta el citado organismo, éste emite el correspondiente certificado. Como es lógico, hasta junio de 2015 los certificados se emitían íntegramente en castellano. Sin embargo, no solo los certificados que emite desde esa fecha el Gobierno de Navarra a través de INAP los realiza en bilingüe vascuence-castellano (con prioridad por la lengua "mayoritaria", claro), sino que ha vuelto a emitir todos los certificados que constan en el historial de todos los empleados públicos que los hayan cursado, en bilingüe, procediendo a colgarlos en pdf en el usuario web que tiene cada persona que haya realizado los citados cursos.

Certificado de un curso emitido por el INAP poco después de realizarse el mismo hará casi una década
 
Certificado emitido recientemente sobre el mismo curso, con objeto exclusivo de bilingualizar el mismo. Lo más curioso de los nuevos certificados es que, a pesar de estar fechados el 20 de mayo de 2016, una semana antes ya estaban disponibles en la web. 
  
Es decir, que en una clara revisión de actos realizados por la Administración, ha vuelto a realizar un trabajo que ya estaba hecho, con objeto de introducir el vascuence no solo a futuro, sino a pasado. Parece que no hay dinero para la extra, que las acciones formativas del 2016 pueden esperar, o que en palabras de Koldo/Luis Martínez los funcionarios tienen que realizar un esfuerzo en pro del acuerdo programático del kanvio, pero no hay problema para volver a realizar el trabajo siempre que sea en pro de la euskaldunización. Por no hablar del cambio en la cartelería, rotulación.... para bilingualizarlos, con el consiguiente costo económico, del cual, el gobierno del kanvio no ha dado cuentas a la ciudadanía, como con casi todo.
 
Ante este panorama, sólo queda preguntarnos  a cuantos hechos como estos vamos a asistir los próximos años (del tipo, euskera en las oposiciones y listas de contratación temporal, euskera en la educación, subvenciones a amiguetes y grupos afines ideológicamente, órganos comunes permanentes camuflados.....), si mereció la pena el kanvio (adelanto que no), y ya nos explicaran IU/IE y Podemos/Ahal Dugu si la preferencia programática a cuestiones meramente identitarias frente a la inexistente acción social del cutrepartito mereció la pena.
 
 
 
Otra de las cosas para las que el kanvio si ha tenido tiempo y dinero ha sido para activar (¿y comprar?) el dominio nafarroa.eus. De nuevo estamos ante un sinsentido, si euskadi tiene el dominio eus, ¿no podría Navarra impulsar el dominio .na o .nav?
 
Viriato


No hay comentarios:

Publicar un comentario