martes, 4 de septiembre de 2018

Palacio de Rozalejo ¿Instituto de des-memoria histérica?


La rama pija del kutrepartito no sabe cómo afrontar el problema político que le ha surgido con el edificio “Palacio de Rozalejo” de Pamplona, actualmente invadido y ocupado ilegalmente por jóvenes cachorros neobatasunos. Si consiente la ocupación ilegal por parte de los jóvenes, jovenas, jovenos y jovenis de bildu, asume por un lado el riesgo de que cualquier problema que pueda surgir por el uso y abuso de una instalación en mal estado será responsabilidad del Gobierno de Navarra, y por otro lado, el escándalo que supone la ocupación ilegal del inmueble por una parte importante de la ciudadanía pamplonesa y navarra. Pero por otro lado, si los desaloja, sus socios neobatasunos y sus palmeros postcomunistas de Podemos y la coalición I-E tensarán políticamente el kutrepartito con el desgaste político que ello supone a menos de un año de las elecciones.

Llevamos más de tres años de escándalos, corruptelas, abusos, actuaciones totalitarias y la ocupación ilegal de un inmueble del Gobierno de Navarra por los neobatasunos amenaza incluso con consecuencias políticas imprevisibles a un kutrepartito que hasta ahora ha aguantado hasta el resquebrajamiento interno de Podemos Navarra o la ruptura del gobierno municipal de Pamplona. Es por ello que el Palacio de Rozalejo supone un auténtico desafío para Geroa Guay, y la ocurrencia de la rama pija del panvasquismo para contentar o intentar contentar a todos sus socios y encima apuntarse un tanto “progre” es destinar el inmueble para el Instituto de la Memoria Histórica, y lo más probable es que los ocupas juveniles neobatasunos serán debidamente compensados con algún otro inmueble en mejor estado en alguna otra ubicación. Es por eso que habrá que estar atentos a las transacciones que realicen entre ellos los del kutrepartito, y denunciar y actuar frente a alguna prebenda con la que pretendan obsequiar a los jóvenes cachorros neobatasunos y a las fuerzas políticas que los apoyan.

Por otro lado, el Instituto de la Memoria Histórica acabará siendo un entramado institucional que además de “enterrar” cifras astronómicas de dinero público (que pagamos entre todos los sufridos contribuyentes), acabará siendo una Comisión de la Verdad que empezará reescribiendo la historia oficial del siglo XX al gusto de las izquierdas radicales (incluyendo al actual PSOE que se ha convertido en lo que siempre fue; izquierda radical), y acabará no solo reescribiendo toda la historia de Navarra al gusto de los panvasquistas pro-Anchluss (anexionistas a la CCAA Vasca), sino que probablemente acaben blanqueando el terrorismo de ETA para justificarlo. Esperemos que no les de tiempo a cometer estas nuevas fechorías, y que el próximo gobierno o bien no dependa del PSOE o éste no acabe blanqueando el terrorismo o el terror rojo del frente popular y dilapidando millones de euros en “su” desmemoria histérica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario